Cuéntanos un poco sobre ti:
¿Qué te apasiona en la vida y quién eres profesionalmente?
Mi nombre es Alessandra, aunque la mayoría de la gente me llama Ale o Nenar.
Desde pequeña he sentido una marcada aversión al blanco y a la sensación de vacío, lo que instintivamente, y luego conscientemente, me llevó a rodearme de objetos y colores terapéuticos.
A lo largo de los años he estudiado, practicado y trabajado mucho con el color en diversos ámbitos, experimentando de primera mano su poder y fuerza comunicativa.
En 2011 me inscribí en el Colegio de Arquitectos de Parma y fundé el estudio de diseño ArchiBaleni. Siguiendo la guía de mi corazón, me especialicé en Diseño de Interiores y Eventos y continué haciendo lo que siempre he hecho mejor: combinar colores para crear certezas, bases profundas y conexiones inquebrantables.
¿Qué significa para ti el color y cómo lo utilizabas antes de descubrir el método RAH?
El color forma parte de mi vida y soy consciente de lo mucho que me influye tanto psicológica como fisiológicamente. Lo utilizo como herramienta de diseño esencial porque es el único que puede dar forma a la forma en que percibimos los espacios que nos rodean.
Antes de descubrir el método RAH, definir la paleta de un proyecto implicaba una larga investigación y observación (utilizando libros, revistas y aplicaciones como Pinterest) para identificar colores recurrentes entre las preferencias y los hábitos de un cliente. A pesar del tiempo invertido, no había garantía de éxito y a menudo me enfrentaba a numerosas revisiones no siempre satisfactorias.

